Gobierno de la liga

Asegurar un deporte consistente e imparcial que se decida en el campo por los jugadores.

Es un gran día para el fútbol americano. El campo está en perfectas condiciones. Los fanáticos, eufóricos, llenan los estadios de la liga, y millones más sintonizan el partido en todo el país. Y así, como un reloj, aparecen los jugadores, se canta el himno nacional y comienza el partido, todo muy puntualmente.

Antes de que comience el partido, el personal de Operaciones del Partido, los representantes de la liga y el equipo de árbitros altamente calificado comienzan a aplicar las reglas diseñadas para crear un ambiente justo para ambos equipos, excitante y entretenido para los fanáticos y que proteja a los jugadores. Los vestidores y las líneas de banda están equipados con la misma tecnología, equipos y suministros para asegurar que ninguno de los equipos tenga una ventaja competitiva injusta.

Después de la patada inicial, los fanáticos miran la acción del partido, con las anotaciones y decisiones discutidas, en marcadores con pantallas de alta tecnología. Los entrenadores transmiten la siguiente jugada a sus mariscales de campo o capitanes defensivos a medida que se desarrolla la acción.

Sí, es un gran día para el fútbol americano. Lo que parece ser el comienzo de la acción es, en realidad, el resultado de horas, semanas y meses de cuidadosa coordinación y preparación por parte de una gran cantidad de profesionales dedicados que trabajan para preservar el deporte favorito de Estados Unidos. La NFL presta especial atención a cada detalle para brindar un partido de fútbol americano profesional: elabora las reglas, capacita a los árbitros, implementa tecnología, entre muchas cosas más, para asegurar que los partidos sean justos y entretenidos.

La liga logra esto mediante un consenso, pero actúa con firmeza cuando es lo mejor para el deporte.

Comienza desde arriba con el Comité Ejecutivo y el comisionado.

El Comité Ejecutivo incluye un representante, dueño o director, de cada uno de los 32 clubes de la liga. Cualquier cambio en las reglas del juego, la política de la liga, la propiedad de los clubes u otra modificación al deporte deberá ser aprobado por al menos tres cuartas partes del comité. No se aprobará nada si no hay un consenso.

Como director ejecutivo de la liga, el comisionado tiene una gran influencia. Sin embargo, debe responder a los dueños, quienes, por votación del comité ejecutivo, tienen el poder de destituirlo.

Con el fin de generar consenso para que se hagan las cosas, la oficina del comisionado trabaja con más de dos docenas de comités que investigan y analizan en profundidad posibles cambios en las reglas o políticas antes de hacer recomendaciones.

El Comité de Competencia, por ejemplo, dirige el proceso de elaboración de reglas, que toma en cuenta las opiniones no solo de su Subcomité de Entrenadores, sino también de varias otras fuentes. Y, como reflejo del énfasis de la liga con respecto a la protección de los jugadores, alrededor de una docena de comités y subcomités, incluidos expertos médicos externos, analizan cuestiones de prevención de lesiones en profundidad.

Cuando se trata de desarrollar jugadores y jugar el partido, el equipo de Operaciones de Fútbol Americano de la NFL es quien lleva la bandera. Troy Vincent, el vicepresidente ejecutivo de Operaciones de Fútbol Americano de la NFL, y su equipo trabajan para establecer una cultura de claridad, consistencia y credibilidad a fin de desarrollar el futuro del deporte y de respetar su pasado mientras se preparan para el futuro y para fortalecer la marca de la NFL para jugadores, entrenadores, clubes y fanáticos.

DECIDIR JUEGOS EN EL CAMPO

La liga hace grandes esfuerzos para presentar un producto consistente, justo y apto para la televisión y los fanáticos. Es esencial que los partidos se decidan en el campo, entre los dos equipos. La “biblia” de Operaciones de Fútbol Americano de la NFL es el Manual de Operaciones del Partido con casi 200 páginas de procedimientos y políticas dedicados únicamente a los juegos de temporada regular.

El Manual de Operaciones del Partido es uno de los tres manuales de políticas completos para los clubes miembro, los otros dos son para operaciones administrativas y comerciales y para relaciones públicas y de los medios. Por necesidad, en general, el Manual de Operaciones del Partido tiene una minuciosidad asombrosa y una precisión casi militar.

El Departamento de Operaciones del Partido de la liga utiliza el manual con el objetivo de regir la conducta de los clubes locales, asegurar la protección de los jugadores y ofrecer las condiciones para un partido justo y apto para fanáticos. Los clubes enfrentan advertencias y otras penalidades por incumplimiento.

El manual representa años de aprendizaje a partir de la supervisión y producción de más de 15 mil partidos de la NFL y a partir de las situaciones, grandes y pequeñas, que han afectado o que podrán afectar el producto en el campo y que pueden resultar en que un equipo tenga una ventaja injusta sobre el otro.

“Tenemos que elaborarlo técnicamente y para muchas situaciones”, dijo Blake Jones, director de Operaciones de Fútbol Americano de la NFL.

La liga agrega elementos al manual con el fin de estar preparados para cualquier circunstancia que pueda afectar un partido. Con el objetivo de proteger a los jugadores, el manual establece la cantidad y el tipo de personal médico que se requiere para cada partido. A fin de asegurar la igualdad competitiva, garantiza que los equipos tengan igual acceso a las herramientas de comunicación. Y en pos de asegurar la igualdad en toda la liga, el manual especifica los pilones exactos, las cadenas de la línea de banda y las ubicaciones de los relojes de posesión y del partido.

La liga también actúa si un club se queja de que el otro está tratando de obtener una ventaja injusta. Para cada cuestión o inquietud que la liga considere legítima, se agrega una entrada en el manual.

El personal de Operaciones del Partido presencia muchos partidos y verifica todo, desde las condiciones del campo y el equipo de comunicaciones hasta la seguridad del partido y la cabina del entrenador (que debe tener dos monitores de televisión para cada equipo) antes del partido.

Cada club designa a una persona para que supervise sus funciones el día del partido y para que sea el punto de contacto del representante de Operaciones del Partido. Esa persona es responsable de resolver las cuestiones operativas o relacionadas con el campo o el estadio que puedan surgir y debe coordinar el seguimiento necesario con la liga.

Como el departamento no puede enviar representantes a todos los partidos, los miembros del personal de Operaciones del Partido supervisan el enfrentamiento desde una sala de conferencias en la oficina central de la NFL, en Nueva York. Realizan llamadas al campo para tratar cualquier inquietud que los equipos o árbitros de la liga puedan tener con los partidos, transmisiones o cualquier otra cuestión relacionada con las operaciones del partido. Esto puede incluir cuestiones tan diversas como equipos que transmiten con ruido artificial de multitud y condiciones climáticas que puedan demorar los partidos. Si el personal de Operaciones del Partido en Nueva York detecta un problema, puede notificar al contacto adecuado en el estadio sobre el problema.

MANTENER LAS APARIENCIAS

La liga también se asegura de que los jugadores lleguen al campo con el equipo aprobado y el uniforme designado que los equipos aceptan usar. Un inspector de uniformes de Operaciones del Partido asiste a cada partido para asegurar que esto se cumpla, no solo por una cuestión de apariencia, sino también para proteger a los jugadores, incluye el uso adecuado obligatorio de rodilleras y musleras, las máscaras aprobadas y viseras transparentes.

Cada equipo debe designar a un miembro del personal para que sea su contacto con los inspectores de uniformes con respecto a las políticas que rigen los uniformes y la vestimenta en el campo.

Los acuerdos de marketing exclusivos de la NFL con las marcas aprobadas establecen que solo estas marcas pueden ser visibles en el campo. Los jugadores no tienen prohibido usar otro equipo aprobado que prefieran, pero deben cubrir o retirar los logos de las marcas no socias.

EL ÚLTIMO RECURSO: MULTAS AL EQUIPO

La NFL se toma las infracciones a las reglas de Operaciones del Partido seriamente, tanto que los clubes corren el riesgo de recibir multas de hasta USD 500.000 por aquellas violaciones “que afectan los aspectos competitivos del partido”.

Algunas violaciones, como llegar tarde para la patada inicial, pueden resultar en faltas de yardaje; y el hecho de no cumplir con una política de uniforme puede resultar en la expulsión temporaria de un jugador del partido.

La liga se toma las violaciones con seriedad porque se toma sus responsabilidades con seriedad. Un buen gobierno es un componente fundamental para presentar un partido justo y entretenido.

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